El Lobo más feroz que nunca

En un duelo igualadísimo, Minesota Timberwolves derrotó 121 a 105 en condición de local a Houston Rockets y se puso 1-2 en la serie.

Joaquin Alis

Con un marco espectacular en el Target Center, Minnesota recibía a Houston con la esperanza de hacerse fuerte en casa y emparejar la serie, que lo tenía abajo por 2 a 0. En la otra vereda estaban los Rockets, que llegaron a este partido con el objetivo de estirar la ventaja para ir poniendo la cabeza en las semifinales de conferencia, que será contra el ganador de la llave entre Oklahoma City Thunder y Utah Jazz.

El partido tuvo un comienzo favorable para el local, que se mostró muy sólido en defensa y contundente en ataque; esto obligó a Mike D'Antoni a pedir un tiempo a pocos minutos del salto inicial. Timberwolves era más, con Jimmy Butler en gran nivel, pero en los últimos dos minutos una ráfaga de la visita emparejó el encuentro y le dio una ventaja de un punto al finalizar el primer cuarto.

En el segundo cuarto volvió a arrancar mejor el local, con unos primeros 6 minutos excelentes que los dejaron arriba en el marcador. El tiempo corría y Minnesota crecía cada vez más, mientras que Houston no encontraba respuestas debido a un gran trabajo defensivo sobre Harden. Sobre el final, dos triples de los Rockets emparejaron la historia para irse al descanso con un resultado a favor de 52-51; pero lo que más preocupación le generó a Timberwolves, fue una torcedura en el tobillo de Butler a falta de un minuto del cierre.

El tercer cuarto tuvo al alero del equipo local en cancha desde el arranque, lo que significó un alivio para Tom Thibodeau y compañía. Sin embargo, Houston Rockets comenzó mejor y volvió a liderar el tanteador con un parcial de 5-2. De ahí en adelante, todo empezó a ser golpe a golpe y aunque a los Wolves se los veía más enteros, la visita no daba el brazo a torcer. Sin embargo, apareció Anthony Town con tres tapones para enloquecer a la afición e inclinar la balanza a favor del local. El tercer parcial finalizo con Timberwolves arriba por 12 unidades.

En el último, Minnesota salió decidido a cerrar el partido, para demostrar que el todo el esfuerzo no fue en vano. Con los ojos bien abiertos y un Butler endemoniado, los locales empezaron a provocar el error rival y a plasmar su buen momento en el aro, para conseguir una ventaja de 18 a nueve minutos del final. Con Harden a la cabeza, Houston quería demostrar que no estaba muerto, pero las réplicas del conjunto local desde la línea de 3 eran letales y empezaban a definir el encuentro. Finalmente, los de Thibodeau se llevaron el partido por 121 a 105 y consiguieron su primera victoria en la historia de los playoffs.

El cuarto partido entre ambos será este lunes a las 21 (hora argentina), con un Timberwolves que buscará igualar la serie en el Target Center.

Máximos anotadores:

James Harden: 29 puntos, 7 asistencias, 7 rebotes

Jimmy Butler: 28 puntos, 5 asistencias, 7 rebotes

Andrew Wiggins: 23 puntos, 8 asistencias, 3 rebotes

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